Un manto asfáltico es una lámina bituminosa prefabricada e impermeable, generalmente compuesta por dos capas de asfalto en sus caras exteriores y un refuerzo central en su interior con materiales como fibra de vidrio, polietileno de alta densidad o poliéster. De estos tres, solo el polietileno de alta densidad es material 100% impermeable, y es el que brinda al producto mayor flexibilidad, maleabilidad y elongación. En el caso de Texsa, la mayoría de sus mantos asfálticos cuentan con refuerzo central en polietileno de alta densidad. La cara superior del manto puede contar con diversos acabados, como foil de aluminio, asfalto, poliéster, mineral, etc., la correcta escogencia dependerá del proyecto.